En una extensa entrevista con el diario La Segunda, la astrónoma María Teresa Ruiz, repasó su historia, sus hitos científicos y su prematura jubilación a causa de una degeneración macular que le ha significado un deterioro progresivo de la visión.
La socia de IWF Chile, Premio Nacional de Ciencias Exactas 1997, ha destacado tanto por su contribución a las ciencias como por su capacidad de romper con los patrones establecidos: fue la primera persona titulada en astronomía de la Universidad de Chile, primera doctora en Astrofísica de la Universidad de Princeton y primera mujer en presidir la Academia Chilena de Ciencias.
“Este fue un parelé muy violento que me dio la vida”, dijo (….) ha sido doloroso, porque dejo lo que más me apasiona, pero me consuelo pensando en que ya hice un aporte. No es que se me haya truncado la carrera a los 30 años”.
Con todo, la científica mira esta nueva etapa con cierto optimismo. “A lo mejor descubro algo distinto que poder hacer (…) ahora estoy bordando al sol, porque él nunca me va a alegar. Con todos sus agujeros y mezclando colores dorados. Como lo tengo siempre en mi computador, le conozco todas sus movidas. Lo que le ponga, nadie me lo va a poder discutir”.